martes, abril 04, 2006

ellas o yo?


Mujeres derrotadas, mujeres maravillosas donde el cuerpo y los ojos se mantienen a la par, brillando con luz propia. Mujeres que se atrevieron a vivir sin desafiar a nadie más que así mismas, sabiendo que el verdadero desafío se encuentra dentro de nosotras. Mujeres que supieron ser y ahora son. A pesar de la fragilidad, a pesar del eterno desamparo. Ellas, que merecen un lugar en esta buena, fértil, desconocida tierra. Es tan fácil hablar bien de ellas, desde la tranquila distancia del ordenador, las tres comidas, las píldoras anticonceptivas. El feminismo.
Vamos, ¿quién me da una moneda para aliviar su alma? ¿Quién financia mi próxima novela sobre las rebeldes de Alasia? Os lo juro: llorarán los irresueltos morales, se compadecerán las ecologistas de carné, me denostarán en la tele los antifeministas. Po_Le_Mi_Ca. Así se llama ahora la promesa de quien vende su alma al diablo por fama y dinero, en estos días (y se deletrea a f r i c a a f h g a n i s t a n o m a s u y o s h e r z e g o b i n a m a l a s y a m e x i c o a m a z o n i a hasta que las letras se agoten, hasta que ya no demos más, hasta que se nos ocurra una solución o den algo mejor en la tele ¡ shhh ! )

1 comentario:

lucian de silenttio dijo...

saludos, mi señorita...
prefiero no decir nada, espero comprenda mi silencio, no es desaprobación, para que palabras, mejor acciones...