Meme

Como momo. Esto es una sorpresa, puesto que soy muy nueva no sabré a quién reenviar la cadena.
* Testigo recibido de: Almada.

* Tamaño total de los archivos de música en mi ordenador: No tengo ordenador, no tengo ordenador, pero tengo casi 1500 canciones en un Ipod.

*Último disco que me compré: Inventario de Sabina. Canciones viejas y un tango del fútbol como para llorar de risa.

* Qué canción escucho ahora: Una de Arjona en el cyber, "tómame como un tequila, de un golpe y sin pensar" dice.

* 5 canciones que escucho un montón o que tienen algún significado para mí:

- Medias negras: Sabina, en el disco doble de conciertos, ella me mata.

- Me haces bien: Drexler es mi nuevo amor.

- Paloma negra: Chavela Vargas, en el disco de la peli de Frida.

- La desilusión: Silvio Rodríguez, en el disco Silvio.

- Evo Morales Blues, versión fantástica del gran Ramón Rocha Monroy.



* 5 personas a las que paso el testigo:

No sé si me cae una maldición kafkiana, pero se lo paso a dos en vez de cinco:

_urah

_disfrutar córdoba

Muñeca de trapo

Muñeca de trapo
corre
juega
es jugada por las olas
caída no volverá a su dueña
No la encuentran

Mira
pasar
el agua

Muñeca de tiempo
Sueña.
(2002)

Luna negra

Sombra de niña lunar
Lunar que apenas es sombra
Sombra de luna en la piel
Que sólo la niña nombra

Nombre de un trozo de miel
Trozo que apenas es sombra
Sombra que ya no será
Luna que marca y que nombra.
(2002)

Color de rosa

Ni el cuerpo es de cristal ni el cerebro transparenta aquello en lo que piensa. Los amantes concentrados en manos y bocas apenas buscan infinito: perderse en el nosotros. El otro llegar al adentro y al afuera corre a cargo de los ojos. Ah, pero mis ojos. Un espacio en la oscuridad, un intento de adivinar mi rostro con la luna, mis ojos son. Agradezco las noches de amor, porque en ellas todos somos amorosos monstruos ciegos. La oscuridad y los cuerpos, mis firmes terrenos. Afuera, en la luz, mi mirada se esconde tras intangibles paredes. Camino las calles del mundo interrumpida en mi contacto con los otros. Y no puedo creer que existen seres que se esconden tras gafas oscuras, o insisten en mirarte a través de paredes color de rosa.

Flores con base

“¿Sueñas con árboles? Si dibujas el árbol reflejas el inconsciente.” Mis árboles siempre tienden la copa a la izquierda, siempre esconden sus raíces en un suelo que lucha por alcanzar el tronco que se escapa. “Sueñas mucho.” El árbol es frondoso, sé que en la copa del dibujo andan ocultos muchos pájaros, alas triangulares que juegan con las líneas.
Las flores que dibujo explotan en todos los cuadernos, innúmeros los pétalos, desbordan los espacios. “¿Nunca viste una flor en la tierra tierra? ¿En la hendija, entre las piedras?”. Por más que pruebo, el talle dibujado termina en un recinto. Cerrado, macetoso, tierra dentro, paso circular y estrecho afuera. Cuando la línea se llene de color, la base será roja. “Si dibujas la flor, dibujas la vida”. Flor sin talle apenas se une a otra: nunca sola, abandonada en el papel. No dibujará mi mano, jamás, una flor cortada.

todos los fuegos el fuego

“Los mejores políticos que he conocido jamás estudiaron política”. Mi hermano está de pie y yo también, la noche envuelve la ciudad junto a una niebla espesa, la ventana apenas deja adivinar al mundo que se extiende afuera a nuestros pies. Estamos de pie, suspendidos por la conversación. Acabamos de resolver al mundo, a nuestro país que siempre arde a flor de piel, venimos de correr juntos -de la mano- a través de todos los caminos de la mente. Es tarde, no podemos dormir, ebria está la sala de palabras e intenciones. “Prométeme que tus hijos serán ...”. “Sí, lo prometo, pero eso sí: riendo, valientes, siempre”. La noche se diluye, envuelta en sombras; un cigarrillo chispea su luciérnaga entre delfines que escapan, iluminados de verde fosforecen hacia la luna. Mi otra yo susurra todos-los-fuegos-el-fuego...mis ojos se cierran mirando la brasa viva, la llama chispea y mi otra yo canta el-cuarto-de-brisa-agarró-candela... el calor parece de ése que alimenta y produce el fósforo, mi manta enorme se arrastra y me envuelve, oculta mis manos, mi otra yo, antes de quedarse dormida, me dice: hoy-fui-feliz-todo-el-día... ella...oscura sobre fuego duerme olvidando dormida la ciudad que despierta.

...comienzo

“El mar es el más peligroso de los desiertos, mira toda el agua que utiliza para esconderse.” Paseo la mirada sobre el gris que ella observa, mientras pienso en que no es en ese desierto sólo donde danzan las mareas. El aire me traspasa mientras recuerdo que bajo la luna se mueven muchas cosas, muchos mundos y cristales secretos, muchas arenas. Quien me habla camina mirando dubitativamente el cielo y el agua, tras su andar cansino aparecen sólo los rastros de una posible huella. Lo que dice, nómade como sabe ser su alma, se espesa y arremolina ante mi oído. Antes de darse la vuelta y desaparecer, me mira. “No olvides que las cosas siempre tienen un adentro y un afuera, que a veces éste no coincide, los grandes están llenos de viento, los pequeños se revisten de fuerza. No olvides que arriba y abajo dependen de si eres pájaro o animal, no olvides que tus ojos ven lo que tu mente te permite ver, no olvides que es insano recordarlo todo, todo el tiempo, no me olvides...”
Ahora sólo me habla el cielo.

No sólo de pan vive el hombre, ni de chocolate la mujer

Así pues, debido a aguitafresca, estamos en la red, para afirmar que todo humano que se respete merece -también- nutrirse de marea y cielo... veremos qué se traen estas páginas.
Mar